ÁLBUMES CLÁSICOS DE FOTOS PARA BODAS, VIAJES O CELEBRACIONES

 

Álbumes de bodas hechos a mano.

Son ideales para los amantes de los álbumes de bodas de siempre, pero también para los que buscan álbumes de calidad para sus recuerdos, viajes, celebraciones, etc.

Son álbumes de fotos de gran calidad.

Personalizados al 100%. Los álbumes pueden ser cuadrados, panorámicos o verticales. De distintos tamaños. Se puede poner unas letras como título en la portada del álbum o bien una imagen. Se pueden encargar con las fotografías ya impresas o bien en blanco para enganchar las imágenes al gusto de cada uno. ¿Quieres saber qué más se puede personalizar? ¡Simplemente pregunta!

Con un amplio muestrario de colores para elegir la tapa o cubierta (hecha de tela de lino).

A través de un programa especial puedo maquetar vuestro álbum a distancia, mostrando página a página como va quedando el diseño del mismo y vosotros podéis ir corrigiendo y/o aceptando cada una de las páginas a través del sistema de comentarios que incorpora el programa hasta la finalización del mismo.
Es súper fácil y es una de las maneras más cómodas que desde casa tengáis un control absoluto de cómo va quedando vuestro álbum de bodas, del viaje, de la celebración o recuerdo que sea.

Os presento algunos de los modelos, pero si estáis buscando con otros colores y acabados, simplemente contactarme y contarme qué buscais.

Se envían a toda España.

Álbumes clásicos de bodas.

Este producto está realizado de forma artesanal, con los mejores acabados y máxima calidad. Tapas de lino.

Las fotografías, impresas previamente en un laboratorio profesional, se pegan o enganchan con un pegamento especial.

  • Grabado en el lomo o en la portada termo impreso en dorado o negro (opcional). El grabado se realizará en el lomo o en la portada del álbum. 
  • Páginas interiores de cartulina de 300g. Color de las páginas a elegir entre: negras y crema.
  • Papel de pergamino entre páginas, para proteger las fotografías.
  • Medidas del álbum a elegir entre 5 tamaños (anchura x la altura de las páginas): 23 x 22,5cm,  25 x 25cm, 23 x 30cm, 35 x 24,4cm o 35 x 35cm.
  • La cantidad de hojas dependerá de las medidas y color de las páginas.

Álbum clásico de fotografías.

Realización de un álbum convertido en diario fotográfico de un viaje a Galicia.

Álbum realizado de forma artesanal, con los mejores acabados y máxima calidad. Tapas de lino.

Las fotografías, impresas previamente en un laboratorio profesional, se pegan o enganchan con un pegamento especial.

Encuadernado con la técnica de encuadernación con tapa suelta, con tapa dura y lomo redondeado. Acabado con tela lisa de encuadernar de color verde pacífico y papel de color gris perla en las guardas (primera y última hoja). Papel interior color blanco roto H.Duria mate de 200g/m2. Grabado en la portada galicia 2014 termo imprimido en color dorado mate, realizado con antiguas letras de imprenta.”

  • Grabado en el lomo o en la portada termo impreso en dorado o negro (opcional). El grabado se realizará en el lomo o en la portada del álbum. 
  • Páginas interiores de cartulina de 300g. Color de las páginas a elegir entre: negras y crema.
  • Papel de pergamino entre páginas, para proteger las fotografías.
  • Medidas del álbum a elegir entre 5 tamaños (anchura x la altura de las páginas): 23 x 22,5cm,  25 x 25cm, 23 x 30cm, 35 x 24,4cm o 35 x 35cm.
  • La cantidad de hojas dependerá de las medidas y color de las páginas.

Álbum digital estilo clásico.

Máxima calidad de los materiales y de las impresiones de las fotografías.

A diferencia de los otros, se hace una maquetación previa que se manda a imprenta. El álbum viene ya con las imágenes impresas y no hay que enganchar las fotografías. Como se hace hoy en día, pero conservando un estilo clásico y elegante.

Este álbum se puede abrir completamente 180º sin temor a que se salte ninguna página con el paso del tiempo o el uso excesivo del mismo. Del mismo modo, las imágenes que ocupan la parte central, apenas se ven afectadas por la división entre páginas.

  • Medidas del álbum a elegir entre (anchura x la altura de las páginas): 35 x 25cm,  40 x 30cm, 30 x 30cm, 35 x 45cm.

Libros de firmas para bodas, celebraciones, cumpleaños, etc.

Libros encuadernados con tela de lino con acabados rústicos y con las guardas (primera y última hoja) de color crema.

Este producto está realizado de forma artesanal, con los mejores acabados y máxima calidad.

  • Medidas del libro: A elegir entre 3 tamaños. Estos son la anchura x la altura del libro.
  • Las hojas interiores son de papel de alta calidad (Fabriano Academia – 200g), perfecto para escribir e incluso dibujar.
  • Grabado en la portada termo impreso en dorado (opcional). El grabado se realizará en la portada del libro, totalmente centrado. 
  • Se puede pedir una caja a juego. El pedido de la caja se debe realizar en el mismo pedido que el libro, ya que la caja se hace totalmente a medida y a juego con el libro.
  • Es recomendable no usar el libro de firmas exclusivamente como álbum de fotos. Ya que el grueso de los papeles de las fotos acabaría “hinchando” el libro y no quedaría estético.
  • Las tapas del libro son de tapa dura y las páginas interiores están cosidas a mano.

 


Materiales

Tapas de lino.

 

Diario de Japón

Ahora que parece que dispongo de algo de tiempo (los últimos meses no ha sido así) necesito retomar el diario de Japón. Porque a pesar de haber apuntado en una libreta las cosas de cada día, es imposible anotarlo todo y tengo miedo que la memoria me falle si lo dejo pasar más tiempo…

Diario de Japon. Kanazawa.

Y es que además, necesito terminarlo aquí para poder empezar el diario en papel, el de verdad, en el que enganchar las fotografías, los tickets, recuerdos, etc.
Supondrá mucho trabajo, pero será divertido.

Galicia 2016

Galicia tiene un aire especial. Y un algo que sin darte cuenta, te engancha. Voy Vamos varias veces al año, los días que más en verano, pero también durante el año en fechas señaladas como aniversarios o simplemente por cierta morriña entre fechas.

Y no hay escapada hacia allí en la que no me lleve por lo menos una cámara. Hasta ahora siempre era una digital y otra analógica. Pero este año decidí llevar dos analógicas, una de 35mm (Contax N1) y otra de 120 (Contax 645), así que todas estas imágenes son de las «antiguas de carrete» porque -una vez más- me engancha la luz y color que se consigue.

Tengo un diario de imágenes en esta web en la que voy añadiendo solamente imágenes analógicas y varias de ellas son de esos «viajes express» a Galicia. Y después, tengo varias series de imágenes de cada uno de los veranos que he pasado allí, aunque de momento sólo he tenido tiempo de preparar una de esas series, la de Galicia (2014), de la que además de un diario fotográfico digital, hice también un diario fotográfico de papel, como los de antes. Debería ir subiendo el resto de los años, pero como decía me hace falta tiempo para editarlas y también un poco de ganas, que no siempre apetece estar un rato largo delante del ordenador. Pero bueno, todo se andará.

Estamos a finales de octubre y hasta hoy no he podido dedicarle el tiempo necesario a editar las imágenes de este año porque he tenido la suerte que me han ido apareciendo distintos encargos fotográficos que -obviamente- me obligaban a dejar de lado esta fotografía de «hobby» y centrarme en la «profesional».

Por cierto, encargos tan distintos como fotografiar farmacias, pisos, productos, familias, prebodas, bodas y postbodas, cárnicas y una entidad social sin ánimo de lucro. Y ahora mismo ando metido en la confección de dos álbumes de boda. Un no parar. Pero hoy me apetecía volver al lado más lúdico y desconectar un rato porque pienso que también es necesario hacerlo. Así que aquí os dejo algunas de las imágenes de este verano en Galicia, a la que ya llaman #galifornia, no sin cierta razón.

Bordeaux et Saint-Émilion

El último fin de semana de julio fuimos a ver a una amiga que llevaba poco más de un mes viviendo en Burdeos (Bordeaux). Viaje relámpago, la verdad, porque en un fin de semana es algo justo para poder conocer mejor un lugar… Aún así, creo que lo aprovechamos bien.
Nos recibieron en la casa donde está alojada con una cena degustación de vinos y quesos, en el transcurso de la cual empecé a hablar francés e inglés con pasmosa facilidad. Esos vinos franceses de la zona entran tan suaves que ni te enteras y es fácil perder el control y romper ciertas formas «afrancesadas» que hasta entonces siempre había atribuido a una cierta clase burguesa inglesa.

Y es que tomar unos vinos con el estómago vacío acompañado únicamente por unos quesos y algo de comida española es fácil, tremendamente fácil, dejar de hablar bajito como ellos y difícil, tremendamente difícil, estar sentadito diciendo «oh, la lá este vino tiene un sabor de roble de guillotine exquisité, mon ami…«. NO. Imposible.

Así que la primera noche en Burdeos (Bordeaux) fue más divertida de lo previsto. El resto del fin de semana podría resumirse en una caminata -sin resaca- de 20km el sábado, recorriendo y conociendo la ciudad, comiendo en un sitio pequeñito y acogedor y cenando en otro buenísimo. Y el domingo tras repetir desayuno con unos deliciosos croissants y cafés, visita cultural a un pequeño pueblo a media hora de Burdeos, Saint-Émilion.
Conocido principalmente por su producción de vino, es hermoso de visitar y envidiar esas casas tan grandes con sus viñedos enormes.

Burdeos es conocida como la pequeña París. Fue un amor a primera vista ya desde nuestra llegada el viernes por la noche. Me enamoré de la ciudad. Y seguramente ya nunca podré ser objetivo cuando hable y recomiende este ciudad de la región de Aquitania, en el sur de Francia.

En fin, nos encantó. Todo. La ciudad, la comida, el vino… Para repetir, sin duda.
Aquí el resto de imágenes.

 

 

Viaje a Japón

Ayer por la noche tuve una cena por la zona de la torre mapfre, en el puerto olímpico de Barcelona. Y en un momento en el que me escapé a fumar un cigarro, tuve una nostalgia inmensa y un deseo terrible de volver a Japón, un año después de haber estado allí. Concretamente a Kyoto.
Una ciudad que me pareció maravillosa desde el minuto cero y que con el paso del tiempo me lo parece aún más cuando en momentos como el de ayer me vienen flashes de sensaciones que tuve y al parecer retuve de un modo nítido y claramente emotivo.
Y eso que -toca puntualizar- terminamos el viaje a Japón con la certeza de que nunca más íbamos a volver. No porque no nos hubiera gustado, nos gustó mucho, pero en ese momento quizás no lo suficiente como para plantearnos regresar a un destino tan lejano, habiendo tantos destinos que aún queremos visitar y conocer.

Y sin embargo, ayer mataba por estar de vuelta. Hasta me imaginé viviendo allí una temporada. Y hoy, escribiendo esta entrada, no es sólo Kyoto, también Tokyo. Quién sabe, mañana también puedo añadir otras ciudades o pueblos de Japón…

Tokyo
Contax 645. Kodak Portra 400